Reza el dicho popular que “la felicidad engorda”, y es que
la comida es un enlace entre personas, por ejemplo, en las reuniones sociales
siempre está presente, y cuando dos personas salen para conocerse, por lo
general, hay comida de por medio.
Sin embargo, disfrutar de un delicioso manjar no tiene que
ser dañino, ni hacer engordar, también se puede optar por recetas saludables
que acompañen la velada, aporten nutrientes y hagan del momento un recuerdo
agradable.
Este pensamiento debería mantenerse día a día, por esto se
recomienda consumir abundantes alimentos en la mañana, de manera balanceada, es
decir, donde se incluyan los tres grandes grupos: proteínas, carbohidratos y
grasas no saturadas. Luego en el almuerzo, la cantidad debe ser menor, pero
suficiente para completar el requerimiento diario de nutrientes. En esta
oportunidad se puede incluir, además de carbohidratos y proteínas, a los
vegetales. Y finalmente en la cena las porciones deben ser aun menores y, en la
medida de lo posible, evitar los carbohidratos.
Dentro de esas recomendaciones para una alimentación
balanceada, es necesario incluir las meriendas entre las comidas principales.
En la merienda de la mañana (entre el desayuno y el almuerzo) es ideal ingerir
frutas, por su aporte de azúcar y energía. En el caso de la merienda antes de
la cena, se sugiere consumir frutos secos.
Estos tips fueron ofrecidos como una iniciativa de una
reconocida empresa de línea blanca, con el fin de difundir información a las
jóvenes parejas para que comiencen su nueva familia con conciencia en la
importancia de alimentación balanceada y saludable.
Un saludo.
Juan Carlos.



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